En nuestra 2da. Campaña de Reforestación en la región de Sierra Nevada, Puebla, dimos un paso importante ante el combate al Cambio Climático. En colaboración con Grupo México y Brose, del 18 al 19 y del 25 al 26 de junio, reunimos a más de 400 personas voluntarias de las comunidades cercanas. Entre ellos estuvieron presentes autoridades auxiliares, alumnos de la Universidad Popular Autónoma de Puebla y equipo de Ayuda en Acción México.
La riqueza del territorio
Sierra Nevada, está al poniente del Valle de Puebla y es ahí en donde estamos impulsando el reforzamiento de una relación socio-ambiental armónica. En mayo de 2020 comenzamos la transformación con nuestra primera Campaña de Reforestación Ayuda en Acción de México. Junto a miembros del Comité de Bienes Comunales y Consejo de Vigilancia de Santiago Tochimizolco, con quienes se identificó la urgencia de sanar al cerro “El Gravillero” que fue azotado con una plaga conocida como “barranador del pino” y en temporada de sequía sufrió un incendio, daños que repercuten a largo plazo.
La importancia de recuperar sus bosques radica en su aprovechamiento, en este espacio desarrollan actividades recreativas, captación de agua y obtienen otros recursos naturales.
La fuerza de la comunidad
Lo que hicimos para cambiar esta situación fue poner en marcha en el 2021 nuestra primera reforestación en la zona. Se incentivó la participación mediante la colaboración con instancias comunitarias, educativas y privadas, como resultado alcanzamos la meta de 8 mil árboles plantados. Este año, reforzamos nuestra huella con otros 8 mil árboles de especies como encino, fresno y pino.
En nuestra 2da. Campaña de Reforestación Ayuda en Acción de México, San Miguel Tecuanipa y San Andrés Calpan encabezaron las actividades del 18 y 19 de julio. En la segunda fase, del 25 y 26 de julio San Lucas Tulcingo y Santiago Tochimizolco los que pusieron manos a la obra.
En estas jornadas se reunieron las autoridades de las juntas auxiliares, comités de bienes comunales, comisariado ejidal, estudiantes de la Universidad Popular Autónoma de Puebla, voluntariado de Grupo México y Brose, con quienes alcanzamos una participación de más de 400 personas.
La ayuda se extiende
El bienestar de este territorio impacta en los poblados cercanos y nutre regiones aledañas de mayor extensión. El ecosistema de Sierra Nevada contribuye en el abastecimiento del río Atoyac, que es parte de la región del Balsas una de las zonas hidrológicas más extensas de México. Cuando plantamos árboles no sólo restituimos la vegetación y protegemos a la fauna local, también se retiene la humedad, se capta más agua de lluvia y mejora su calidad para nuestro consumo.
Esta conexión de la sociedad con el medio ambiente implica reconocer que nuestra supervivencia depende de mantener el equilibrio con la naturaleza. Por eso buscamos mejorar la vida de las personas afrontando los efectos del Cambio Climático.
Actualmente, tenemos presencia en Oaxaca y Chiapas con proyectos respetuosos de la naturaleza y propulsores del bienestar de las familias: el sistema Milpa Intercalada con Árboles Frutales (MIAF), desarrollo de emprendimientos locales con enfoque de economía circular, sensibilización y formación en el cuidado al medio ambiente y eco construcciones con base en residuos.